En la actualidad existen muchos tipos de familias.
Por ejemplo hay familias monoparentales con una madre o un padre,
familias con dos padres o con dos madres… y todas ellas pueden criar a
niños felices que no sientan que les falta algo en su vida. Pero a
continuación, queremos detallar el vínculo que tiene un padre con el
desarrollo infantil.
Porque cuando el padre está presente, su papel tiene gran importancia y eso se debe tener en cuenta y dejar atrás el pensamiento obsoleto de décadas anteriores donde el papel del padre no se tenía tan en cuenta en la crianza de los hijos.
A medida que los niños maduran, el papel del juego se vuelve cada vez más importante en su desarrollo. Aunque parece estereotipado decir que los papás se involucran en juegos más brutos, hay estudios que respaldan que los padres tienen un papel primordial en el desarrollo socioemocional de los niños pequeños.
Se demostró que los niños cuyos padres eran participantes activos en el juego, particularmente en los juegos brutos, tenían una fuerte competencia social en la escuela y un mejor comportamiento. Si bien ese juego puede parecer ruidoso, en realidad tiene sorprendentes beneficios ocultos en el desarrollo de los hijos.
Del mismo modo, los niños con padres involucrados tenían más probabilidades de graduarse en la escuela secundaria y en la universidad. Queda claro que las contribuciones de los padres al desarrollo cognitivo de los niños van mucho más allá de los recursos financieros disponibles para ellos (por ejemplo, cuando el padre aporta dinero pero que mantiene un comportamiento pasivo en la crianza).
La presencia de un padre activo y comprometido puede actuar como una fuerza protectora en la vida de los adolescentes. Por ejemplo, hay estudios que encuentran que los adolescentes con padres involucrados tienen menos probabilidades de tener problemas de delincuencia y depresión.
El papel de la relación de apego del padre se extiende también a la adolescencia. Aunque los niños son mayores y más maduros, esa relación de apego fundamental puede tener efectos de larga duración. Otros estudios dejan claro que los adolescentes que tienen un apego seguro a sus padres tienen una autoestima más alta y es menos probable que tengan comportamientos delincuentes. El tiempo que los padres invierten en esos primeros años estableciendo un fuerte vínculo con sus hijos continúa beneficiándolos en la adolescencia.
Después de años de disminución de su papel en la crianza de los hijos, ahora se entiende que los padres contribuyen de manera igual al desarrollo de éstos. A través de la investigación y la experiencia personal, vemos que los padres juegan un papel significativo y complementario al de las madres. Los padres influyen en los niños de manera significativa emocional y psicológica que dura toda la vida.
Porque cuando el padre está presente, su papel tiene gran importancia y eso se debe tener en cuenta y dejar atrás el pensamiento obsoleto de décadas anteriores donde el papel del padre no se tenía tan en cuenta en la crianza de los hijos.
Los años de infancia
El impacto positivo de los padres activos en la crianza no termina en los primeros años de vida. Durante la infancia, el importante papel de los padres continúa a medida que los niños se desarrollan emocional, física e intelectualmente. Al igual que con las madres, los padres influyen en el desarrollo de los niños, en gran medida con la relación de apego que tienen con sus hijos durante toda la infancia.Desarrollo socioemocional
El desarrollo socioemocional es un área clave donde se ve claramente el impacto de los padres. El apego seguro con los padres respalda las habilidades emocionales como la empatía y la capacidad de entender las emociones, incluso en los años de edad escolar.A medida que los niños maduran, el papel del juego se vuelve cada vez más importante en su desarrollo. Aunque parece estereotipado decir que los papás se involucran en juegos más brutos, hay estudios que respaldan que los padres tienen un papel primordial en el desarrollo socioemocional de los niños pequeños.
Se demostró que los niños cuyos padres eran participantes activos en el juego, particularmente en los juegos brutos, tenían una fuerte competencia social en la escuela y un mejor comportamiento. Si bien ese juego puede parecer ruidoso, en realidad tiene sorprendentes beneficios ocultos en el desarrollo de los hijos.
Educación y desarrollo cognitivo
Investigaciones recientes nos están abriendo los ojos sobre el hecho de que la participación cotidiana del padre en la crianza de sus hijos también influye en su educación y desarrollo cognitivo. Varios estudios han demostrado que la participación del padre en actividades como la lectura y las salidas juntos predijeron una mayor progresión educativa de los niños.Del mismo modo, los niños con padres involucrados tenían más probabilidades de graduarse en la escuela secundaria y en la universidad. Queda claro que las contribuciones de los padres al desarrollo cognitivo de los niños van mucho más allá de los recursos financieros disponibles para ellos (por ejemplo, cuando el padre aporta dinero pero que mantiene un comportamiento pasivo en la crianza).
Adolescencia
Los años de la adolescencia pueden ser un momento turbulento para muchos niños. Estos son los años en que las influencias de los compañeros, el comportamiento arriesgado y los problemas de salud mental pueden afianzarse si no hay más influencias positivas. Los padres pueden desempeñar un papel crucial en la vida de los niños durante esta etapa.La presencia de un padre activo y comprometido puede actuar como una fuerza protectora en la vida de los adolescentes. Por ejemplo, hay estudios que encuentran que los adolescentes con padres involucrados tienen menos probabilidades de tener problemas de delincuencia y depresión.
El papel de la relación de apego del padre se extiende también a la adolescencia. Aunque los niños son mayores y más maduros, esa relación de apego fundamental puede tener efectos de larga duración. Otros estudios dejan claro que los adolescentes que tienen un apego seguro a sus padres tienen una autoestima más alta y es menos probable que tengan comportamientos delincuentes. El tiempo que los padres invierten en esos primeros años estableciendo un fuerte vínculo con sus hijos continúa beneficiándolos en la adolescencia.
Después de años de disminución de su papel en la crianza de los hijos, ahora se entiende que los padres contribuyen de manera igual al desarrollo de éstos. A través de la investigación y la experiencia personal, vemos que los padres juegan un papel significativo y complementario al de las madres. Los padres influyen en los niños de manera significativa emocional y psicológica que dura toda la vida.