11.7.20

Pares e impares- Matemáticas Montessori


A partir de ese día y durante un tiempo, estuvimos trabajando los números pares e impares con el libro y con contadores. Ya había trabajado con él en un par de ocasiones  lo que eran los números pares e impares y la diferencia que había entre ellos. El cuento nos ayudó a retomar (aunque la forma en la que hicimos el ejercicio no es la presentación oficial, me fui adaptando según el día y el momento):
  • Volví a poner los números en orden. Él los sacaba de la caja, los nombraba y me los daba. Yo los iba colocando en orden.
  • Una vez los tuvimos colocados todos empezamos a sacar contadores y los fuimos colocando por parejas. En los impares, el que quedaba suelto lo poníamos en el centro de los dos últimos.20170320_18135720170320_181842
  • Una vez ya estaban colocados los contadores debajo de los números fuimos pasando el dedo índice entre las dos columnas de contadores. En orden, despacio y fijándonos.
  • Este es el uno, ¿Podemos pasar el dedo por el medio? No. Pues entonces el número lo vamos a colocar aquí arriba porque es un número impar.
  • Este es el dos, ¿Podemos pasar el dedo por el medio? Sí. Pues entonces el número no lo vamos a tocar. Lo dejamos en el mismo sitio porque es un número par. ¿Ves que los dos contadores forman una pareja? Pareja significa que tenemos dos. Por eso decimos que es un número par. (recalcaba mucho “par”)
  • Y así hasta que llegamos al diez. En nombramos los números impares en voz alta y luego los números pares.


A partir de aquí durante varios días de Pascua, leímos el libro. Hacíamos dos o tres páginas, según el día y las fuerzas. Para estos momentos de lectura preparaba las fichas de madera de los colgadores de perlas. Nuestro gran niño los ordenaba. Tenía dos papelitos tamaño cuartilla donde ponía PARES e IMPARES, y encima de cada uno ponía la cajita de los números de los contadores.

Después, nos poníamos manos a la obra con el libro. Empezábamos a leer, a veces él, a veces yo. El caso era parar cuando apareciese un número. Cuando se daba el caso, nuestro gran niño lo buscaba de entre las fichas y procedíamos de esta manera:
Esta actividad la hicimos varias veces. Hoy por hoy aún no ha adquirido ni generalizado el concepto pero sabe que hay unos números que son pares, otros que son impares y que todo esto tiene algo que ver con las parejas. No sé hasta donde llegará o si lo entenderá algún día pero lo cierto es que le ayuda a descubrir nuevos conceptos, a indagar, a crecer…