Así funciona Montessori
UN CHECKLIST PARA ENTENDER
1. ¿Cómo son los espacios?Los espacios Montessori pueden variar dependiendo de la geografía de cada lugar. Las reglas básicas son: espacios organizados, muebles a la altura de los niños, actividades disponibles y organizadas según el nivel de dificultad. Luz natural donde sea posible.
2. ¿Cómo es el material con el que aprenden los niños?
De excelente calidad y muy atractivos. La idea es que el niño aprenda a cuidar los materiales. Esto sólo se logra si los materiales, (desde un vaso hasta una bandeja) sean de alta calidad, de materiales naturales varios y atractivos. La lógica nos dicta que a los niños hay que darle lo contrario a esto para que no lo dañen. ¿Cómo van a cuidar las cosas que no tienen importancia? Un vaso de plástico, cuando se cae, no se rompe. ¿Cómo va a aprender un niño a entender cuánto cuidado debe tener con ese vaso? Es mejor darle un vaso de vidrio (pequeño y grueso). En todos mis años trabajando con niños, si un vaso se rompe una vez, jamás vuelve a pasar.
3. ¿Cómo son los adultos?
Las profesoras Montessori tienen que pasar por un proceso de transformación muy profundo. Deben aprender a conocer a cada niño, entender sus ritmos y saber cómo guiarlo para que se pueda desarrollar lo mejor posible. Deben dejar de lado sus propios prejuicios y amar el conocimiento para poder transmitirlo.
Mitos sobre Montessori
hay que saber para poder escoger
Hay tantos prejuicios sobre Montessori que enfurecerían hasta la profesora más zen. Los conceptos del método hacen que muchos padres y educadores duden de su efectividad. Los niños en Montessori tienen independencia, libertad, autonomía, creatividad y curiosidad.Estos son los mitos más comunes:
Falso, falso, falso. Los límites son muy claros en un salón Montessori. Son pocos y no-negociables. Sin embargo, no es un estado de vigilancia policial. Las profesoras tienen altas expectativas del comportamiento de los niños y ellos responden a la altura.
2. "Montessori no exige a los niños"
Nada más alejado de la verdad. En cada salón hay material para niños de diferentes edades, por tanto, siempre van a estar estimulados. Las profesoras siguen el plan de estudio de cada niño y semanalmente evalúan dónde están en su desarrollo. Lo que nunca hacen es obligar a los niños a aprender, porque es prácticamente imposible. Sin embargo, son expertas en presentar el conocimiento tan atractivamente, que es muy difícil para un niño decir que no.
3. "Montessori no es para mi hijo"
A menos que tu hijo tenga grave problemas de comportamiento y necesite un adulto a toda hora, Montessori es para todos los niños. Sin embargo, no es para todos los padres. Las expectativas de los padres son muy variadas y muchas veces es su relación con el método la que no funciona.
Niños pintando en grupo. Aunque estén acompañados, su progreso es individual