11.7.19

Cuándo enseñar a leer a los niños

mejor momento para iniciar el aprendizaje de la lectura y la escritura en niños Hoy quiero hablarte del eterno dilema: ¿a qué edad deben los niños aprender a leer? 

En Finlandia, todo un referente en temas de educación, los niños no aprender a leer hasta los 7 años. Pero lo más significativo de este país es que al cabo de sólo dos años, los niños finlandeses lideran todos los rankings en temas de competencias lectoras. ¡Y eso es así desde hace 21 años!

Por el contrario, en España cada vez se avanza más el momento de enseñar a los niños a leer y escribir, pero los resultados en comprensión lectora siguen siendo muy bajos y el fracaso escolar muy alto. 

La pregunta pues es obligada: ¿están los alumnos de educación infantil preparados para iniciar el proceso lector?; ¿cuándo está su cerebro preparado evolutivamente para dicho aprendizaje?

Jordi Catalán (licenciado en medicina y cirugía por la UB, especialista en atender a niños con problemas en el desarrollo en el Instituto del Desarrollo Infantil y con 40 años de experiencia en dicha área) lo tiene claro y lo contaba en su intervención en el I Congreso Internacional de Comprensión Lectora Infantil y Primaria (CICLIP).

Quiero compartir contigo mis apuntes de esa interesante conferencia y las claves que Jordi Catalán daba para evaluar si un niño está preparado para comenzar el difícil proceso de aprender a leer. 


mejor momento para iniciar el aprendizaje de la lectura y la escritura en niños, capacidades iniciales del niño antes de emprender el camino
El aprendizaje de la lectura es un camino largo y difícil, es importante que el niño esté bien preparado para emprenderlo

Según este especialista, el problema actual de nuestros sistema educativo es que pedimos a los niños ciertas exigencias en función del curso y la escuela en la que están, sin una evaluación previa de sus capacidades. 

Para que un niño pueda integrar, comprender y avanzar en el proceso lector, diferentes funciones de su cerebro deben funcionar correctamente y haber madurado lo suficiente para afrontar el duro reto que supone aprender a leer. 

La clave está pues en la madurez del niño y no en su edad: "hay niños que maduran más rápido y niños que maduran más lentos, algunos tienen una velocidad de aprendizaje más rápido que otros, y todos pueden son normales".

niños atentos, quietos, sentados escuchando un cuento: requisito madurativo para iniciar el proceso de aprender a leer

Lo ideal sería, antes de empezar el aprendizaje de la lectura, poder evaluar a cada niño individualmente y ver si ya ha alcanzado los requisitos madurativos necesarios para iniciar el proceso de aprender a leer, que según Jordi Catalán son los siguientes:

1. Coordinación motora preparada: habilidad de moverse de forma adecuada, buena coordinación de movimientos, habilidoso en sus movimientos. Por ejemplo: sabe montar en bici, saltar a la pata coja, aguantarse con un pie,… Por supuesto con el movimiento amplio no se lee, pero todo eso nos indica que el niño tiene una buena base en su cerebro reptil y que éste funciona de forma adecuada.


2. Dominar el control del movimiento: el niño debe ser capaz de estar sentado, quieto y atento. En este sentido, por ejemplo, los niños muy movidos no tienen capacidad para poder estar quietos y atentos a lo que se les está presentando para que lean, porque aún no controlan su movimiento, así que intentarlo será posiblemente un fracaso y un sobreesfuerzo para ellos.

3. Buena organización visual: no sólo agudeza (no tener miopía, hipermetropía, etc) sino tener unos buenos movimientos visuales y coordinación del movimiento fino. Porque con esta capacidad el niño, por ejemplo, podrá seguir las líneas del texto sin que haya saltos ni repeticiones. 

niño leyendo en sofá, con buena organización visual para poder seguir la línea del texto sin saltos ni repeticiones

4. Vocabulario rico y saber expresar ideas. El niño debe tener una buena base de información.


5. Capacidad de escucha y, sobretodo, de escucharse a si mismo. La no adquisición de esta capacidad está muy relacionada con problemas auditivos, otitis, drenajes,… eso causa que el proceso del lenguaje llegue más tarde, porque aunque se haya resuelto el problema, el niño ha sufrido un desfase, durante una época básica en su desarrollo no ha recibido toda la información que debería y su base de datos es menor.


6. Lateraridad bien definida.

 
7. Motivación: por último, pero no por eso menos importante, es básico que el niño esté motivado para aprender a leer. 


Y Jordi Catalán añade un último requisito, que ya no es intrínseco del niño, pero igualmente importante: el método de aprendizaje de la lectura debe ser atractivo.


niños leyendo cuento, motivados por la lectura y por aprender a leer
El aprendizaje de la lectura es uno de los procesos más difíciles al que deberá hacer frente el niño, por eso es importante que llegue a él bien preparado. Si encima de la dificultad que ya entraña de por sí aprender a leer, el niño acumula otras dificultades debido a que aún no ha madurado del todo, el proceso puede hacerse realmente complicado.


Si el niño llega sin todos esos requisitos mencionados, el aprendizaje se le hará muy cuesta arriba y aparecerá la desmotivación, la falta de interés e incluso cierta resistencia y bloqueo. Si algo me cuesta desmesuradamente, voy a evitarlo. Si como consecuencia de mi dificultad me ponen a repetir lecturas y me obligan a leer más, entonces me agobiaré, creeré que no soy capaz, que las cosas no me salen bien, mi actitud será a la defensiva,...

Lo peor de todo es el recuerdo que quedará en ese niño, sin duda para él la lectura no será algo divertido y apasionante, sino un fastidio. Al final, conseguiremos que aprenda a leer, pero no le habremos enseñado a amar la lectura, así que difícilmente se convertirá en un adulto que lea.

niños leyendo en su tiempo libre, porque lo viven como algo divertido y apasionante

Resumiendo, no hay una edad concreta a la que empezar la lectura, lo ideal sería evaluar a cada niño y poder hacer un buen diagnóstico, para ver si está preparado para iniciar el proceso o no y descubrir si hay dificultades concretas y trabajar sobre ellas.

Entiendo que en el sistema educativo actual es difícil aplicar esto, pero avanzar el aprendizaje de la lectura tampoco es la solución, sin duda no para la mayoría de los alumnos. Es mejor dedicar el tiempo a desarrollar esas habilidades y requisitos que el niño necesitará para afrontar con éxito el aprendizaje.

También desde casa podemos ayudar a desarrollarlas, como te comentaba hace un tiempo en: cómo facilitar el aprendizaje de la lectura y la escritura con acciones cotidianas.

¿Qué opinas de todo esto?. Cuéntame porque tu opinión y experiencia me importan y nos enriquecen a todos. ¡Buenas lecturas!