El
método Montessori respeta los tiempos del desarrollo de cada niño
despertando en ellos una inmensa curiosidad que les acompaña el resto de
su vida
Montessori, más vigente que nunca
Las generaciones van
cambiando y con ello los modelos educativos, es de llamar la atención
que el método #Montessori de finales del siglo XIX tenga una vigencia y
relevancia innegables, modelos educativos y metodologías han ido y
venido pero este hermoso método creado por una humilde y brillante
Maestra «María Montessori» parece adaptarse a la perfección a cada
generación y puedo decir con toda certeza que estas generaciones sí que
han ido cambiando. Meditando sobre ello caigo en cuenta de que este
método posee la sabiduría de una persona que conocía y amaba la
humanidad y que sabía que el ser humano tiene necesidades intrínsecas a
su naturaleza como son el respeto a la maravillosa individualidad con
qué Dios nos ha bendecido, la necesidad de sentirse seguro, amado,
aceptado, miembro de un grupo pero también un ser individual con sus
propios intereses y es aquí donde radica su éxito.
Montessori fomenta la curiosidad y la creatividad
Los niños son curiosos por naturaleza y de hecho todos lo hemos sido,
para motivar que esta curiosidad natural el método Montessori es
fabuloso ya permite al niño descubrir sus intereses, fomenta la
observación y va más allá pues el niño puede elegir entre variados
contenidos aquellos que lo atraen, los conocimientos para ser asimilados
deben tener un componente emotivo, el niño entonces puede construir su
propio conocimiento mediante la ayuda de su Guía Montessori que con amor
va facilitando al niño recursos para el #aprendizaje.
Los materiales Montessori suelen ser muy atractivos y hasta a uno como adulto le dan ganas de explorarlos, los hay desde los creados específicamente para utilizar con él el método hasta cosas comunes como una jarra, los platos, una regadera, un trapo de cocina inclusive algunas Guías y padres de familia se han dado a la tarea de idear nuevo material.
Respeto al desarrollo del niño
Esta es una de las
mayores bondades del método Montessori, en este método no se fomenta la
competitividad sino que se fomenta el desarrollo de competencias, cada
niño tiene su propio proceso y cada pequeño alcanza sus metas en
diferente tiempo, la guía no corre ni hace correr al niño más allá de
sus capacidades, el material vuelve a ser presentado paciente y
amorosamente por la guía hasta que se han logrado los aprendizajes
esperados e inclusive los no esperados porque el niño encuentra formas
diferentes de trabajar con el mismo material.
Primero, la formación para la vida
Los niños antes de aprender complicados conocimientos de Ciencia,
Gramática, Historia requieren ser autosuficientes, es decir requieren
ser preparados para la vida, para la convivencia, para su auto-cuidado y
para ello los primeros años que cursa el niño se llaman casa de niños y
es que los pequeños se desarrollan en un ambiente amoroso y familiar
donde se les enseña desde como servirse un vaso de agua hasta dejar su
amado salón en perfecto orden.
Yo no soy una experta en el método pero sí soy mamá de una niña Montessori y realmente ha sido una de las experiencias más maravillosas en la vida de mi hija y de nosotros como padres. Agradecemos a su innolvidable y amada guía, Irma Luz Morales. #Educación niños