La pedagogía Montessori es para muchas personas todo un referente en la crianza de los más pequeños.
Si bien es cierto que hay quien no termina de aceptar muchas de sus
ideas, como puede ser la autonomía y la libertad del niño a la hora de
aprender, no deja de ser un enfoque del cual, podemos aprender grandes
cosas.El enfoque que nos dejó Maria Montessori desde su propia experiencia como médico, pedagoga y experta en el mundo del niño, nos viene muy bien por ejemplo para aprender determinadas pautas en el día a día con bebés de entre 6 y 12 años. Cada cual es libre de asumirlos o no, pero desde luego, no deja de ser una perspectiva en la cual, podemos educar niños más autónomos, capaces y felices. Vale pues la pena tenerlo en cuenta, y desde “Madres hoy” te invitamos a que lo descubras.
Pedagogía Montessori: bases desde las cuales educar a nuestros niños
Puedes leer muchos libros sobre pedagogía y crianza infantil. Educar y vivir la maternidad es una aventura que no solo nos sirve para educar a nuestros niños, también nos sirve a nosotras para enriquecernos como madres.
Tener siempre en cuenta la pedagogía Montessori en el día a día nos va a permitir relacionarnos con nuestros niños de una forma más íntima, divertida y plena de la cual vas a disfrutar. Los ejes básicos que nos dejó María Montessori desde su famosa “pedagogía de la libertad”, puede resumirse en estos ámbitos:
- El cerebro de los niños es increíblemente plástico y ávido de aprendizajes. Esto es algo que todas sabemos. El cerebro de los bebés está ávido de aprendizajes, de experiencias, ahí donde cualquier estímulo va ayudarles a crecer y a formarse como personas. l
- Debemos poner atención a los llamados “periodos sensibles”: es importante recordar que desde que los niños nacen hasta llegados los 6 años, van a experimentar la fase más intensa en su desarrollo. Son periodos en los que van a ser mucho más receptivos, y donde tu ayuda como madre es imprescindible.
- El ambiente diseñado: como ya sabes, todo estímulo supone una unión neuronal en el cerebro del niño, y por tanto un aprendizaje que se integra. Es por ello que sería muy adecuado disponer de un entorno diseñado para propiciar una mayor estimulación en el niño.
- Tu papel como guía en el día a día de tu hijo es indispensable: eres parte de la vida y del crecimiento de tu hijo. Lo más importante es propiciar en el día a día la madurez y la independencia del niño, y tú eres su facilitadora, su mejor guía.
Cómo preparar el mejor ambiente para el aprendizaje en tus hijos
Puede que lo primero que hayas pensado al leer esto es… ¿Pero cuánto dinero me va a costar? No te asustes, adaptar la casa para enriquecer el crecimiento de los bebés requiere más imaginación que desembolso económico.La premisa básica es ofrecer el mayor tipo de estímulos al bebé siempre de la forma más segura posible, evitándole todo tipo de riesgos. Para ello, ten en cuenta los siguientes consejos:
- Los juguetes y las pertenencias del bebé deben estar siempre accesible a su altura.
- El orden es indispensable. Debemos preocuparnos cada día de que todo esté en su sitio, y una vez se termina de jugar, debemos ayudar al niño a que guarde el juguete o que nos vea cómo lo hacemos.
- Permite que esté presente en tus tareas. Si estás limpiando favorece que toque esa escoba, si estás cocinando deja que huela los alimentos, adviértele de los riesgos, enséñale cómo lo haces.
- Sería interesante que o bien en el salón de la casa o en su propia habitación, pongas una gran manta o alfombra como espacio de actividad básica. Aquí situamos los objetos estímulo y sus juguetes.
Los mejores juegos cotidianos según la pedagogía Montessori
No importa si tus hijos tiene diferentes edades. Según la pedagogía Montessori los niños de diferentes edades pueden enriquecerse entre sí, adquieren responsabilidades y aprenden. No temas colocar a tu bebé en compañía de tus hijos mayores. La experiencia será muy bonita.
El cajón de los tesoros
En la casa tendremos siempre nuestro cajón de tesoros. Puede ser una simple caja donde cada día pondremos estímulos nuevos que los niños deben descubrir:- Opta por objetos que sean estimulantes y con colores intensos.
- Evita el plástico, siempre será mejor la madera, la tela…
- Deben ser objetos que estimulen la coordinación mano-ojo
- Puedes poner alimentos, como manzanas, trozos de pan, para que así experimenten nuevos sabores.
Jugamos al escondite para favorecer la comunicación
Una idea estupenda del método Montessori para estimular la atención, el lenguaje y el descubrimiento del bebé, es jugar al escondite.- Podemos esconderles en esa alfombra o manta donde el niño está situado, algún juguete. Pregúntale donde está, estimúlalo con palabras y gestos.
- Dependiendo de su edad, pondremos un grado más de dificultad. La idea es siempre incentivar su curiosidad, su autonomía a la hora de buscar y su comunicación con nosotros.
Títeres y marionetas
Seguro que tienes más de una en casa. Los títeres y las marionetas son una forma maravillosa de relacionarnos con nuestros bebés para conseguir todas estas dimensiones:- Captar su atención
- Incentivar su lenguaje
- Potenciar su imaginación cuando ya han adquirido las competencias comunicativas. La idea sería invitarles a crear historias, situaciones, diálogos.
- Mejoramos la relación con nuestros hijos.
Juegos relacionados con la vida práctica
Para enseñarles a los niños la necesidad de ser responsables y maduros, una buena idea es fomentar el juego relacionado con la vida práctica.
- No se trata en absoluto de ponerlos ya a cocinar o a cambiar la rueda de un coche. Nunca deben perder la sensación de que están jugando, la importancia es que se sientan libres “jugando a ser mayores”.
- Ofréceles una escoba menuda y deja que barran bolas, canicas o muñecos. Se trata de jugar pero adquiriendo competencias prácticas.
- Deja que entren contigo a la cocina y que preparen por ejemplo una ensalada o un pastel sencillo. No pasa nada si el resultado no sirve para comer, deja que interactúen con las texturas, olores y sabores. Que disfruten jugando a ser adultos.
Mientras todo el ambiente del hogar esté controlado y no existan riesgos estaremos seguros. A partir de ahí nuestra misión es la de guiar sin sancionar. No seas esa madre que comete siempre los siguientes errores:
- Hacerles la vida fácil recogiendo sus juguetes, haciendo sus tareas por ellos.
- Impidiendo que hagan esto y lo otro por temor a que ocurran determinadas cosas. La sobreprotección exagerada da al mundo niños inseguros. No pasa nada si se les cae ese vaso de agua, si se ensucian con esa planta que quieren oler.