Este método educativo creado por María Montessori derribó la barrera de cultura y religión: ¿por qué fue tan importante?
En otra nota te contamos quién fue María Montessori, una impresionante mujer que dio su vida por sus ideales al pensar que el futuro de la humanidad recaía en el desarrollo de los niños, para lo cual creó un método para el desarrollo de los infantes. Si quieres saber lo más importante de la vida de María lee esta nota.
El método Montessori fue desarrollado a principios del siglo XX para su uso en niños y preadolescentes, y a pesar de que ya han pasado muchos años de que lo publicó su creadora, sigue siendo vigente y seguido por miles de pedagogos y maestros alrededor del mundo.
Pero pensémoslo un poco: la relevancia de esto no es menor porque la educación representa una parte fundamental de la vida humana. Es cierto que nuestra formación determina algunos rasgos de nuestro futuro, entonces, ¿es lo mismo aprender con cualquier método? Es lo que se preguntó María desde un principio y lo que la llevó a llegar a conclusiones que la alejaron del método tradicional de aprendizaje.
María Montessori fue nominada tres veces al Premio Nobel por su dedicación a la educación. (Foto: Wikipedia)
En ese momento la percepción que se tenía del niño y de la educación era muy diferente a la de ahora, por lo que tal vez a nosotros no nos parezca un descubrimiento sorprendente lo que planteó María, sin embargo, para ese entonces era realmente revolucionario. Por eso, sin más, ¿qué propone el método de Montessori?
El método pretende esto:
*Ayuda al desarrollo natural del ser humano
*Estimula al niño a formar su carácter y manifestar libremente su personalidad, ante lo que recibe seguridad y respeto
*Favorece la responsabilidad y el desarrollo de la autodisciplina para que los niños consigan su independencia y libertad
*Desarrolla la capacidad de participación para que el niño sea aceptado
*Reconoce que el niño se construye a sí mismo, pero lo guía para su formación espiritual e intelectual
Las potencias para ser la mejor versión de ti mismo
El método propuesto por María hace énfasis en la necesidad de potencializar el desarrollo natural de las aptitudes de los alumnos a través de diversas dinámicas como la autodirección, la exploración, el descubrimiento, el juego, el trabajo en equipo, la concentración y la imaginación.
¿De qué manera es diferente a lo que era el método tradicional? Pues que se aleja de modelos rígidos y pone su atención en la espontaneidad y la elección libre de los alumnos, pues el respeto y la independencia de los niños era algo clave para Montessori.
Además de ser una propuesta educativa, el método Montessori es concebido como un modelo teórico del desarrollo humano y hasta una filosofía que parte de que nos autoconstruimos psicológicamente a través de la interacción con el entorno, entonces, mientras más herramientas tengamos para una construcción firme, nuestro "yo" futuro será una persona más estable y preparada (no sólo en el sentido de conocimiento racional).
Las etapas: separar para crecer
María explicaba el desarrollo del niño hasta ser un adulto y lo separaba en 4 etapas que llamó planos: de 0 a 6 años, de 6 a 12 años, de 12 a 18 años y de 18 a 24 años.
El método Montessori pretende adaptarse a las necesidades de las etapas, a diferencia del sistema educativo tradicional, del que María decía que a pesar de que era consciente de las etapas, no atiende a las particularidades de cada una de ellas y se olvida de la etapa fundamental que es la primera, cuando los niños tienen una mente absorbente.
Un ambiente ideal
Este método apuesta a que un ambiente ideal es clave para el desarrollo emocional y racional, por lo que se esfuerza por construir “entornos preparados”, esto es, que los salones o espacios educativos estén adaptados a las necesidades de los alumnos en función a su edad. No sólo que haya los materiales que necesitan, sino que estén a su alcance.
Debe propiciar el movimiento y la realización de actividades, estar limpio y ordenado (no como tu cuarto) y ser estéticamente atractivo para que los niños estén en armonía y a gusto con su entorno.
Montessori
concebía a las maestras como guías y no como autoridades con el deber
de corregir. ((Foto: Association Montessori Internationale)
El material
Los materiales deben estar cool para que al niño le llamen la atención, por eso pretende que sean naturales, progresivos, atractivos y con un control de error.
En los ambientes controlados los materiales se deben encontrar distribuidos en diferentes áreas de fácil acceso para los pequeños. Están hechos generalmente con elementos naturales como madera, vidrio y metal.
Los adultos (y maestros)
El adulto sólo es la conexión entre el niño y el ambiente preparado, por lo que su meta sólo es ayudarlo a ayudarse, de ninguna forma ser una autoridad inflexible. El adulto debe de ser de gran ayuda en la construcción de la confianza en sí mismo del pequeño.
Montessori siempre se refirió a las maestras como “guías” y su papel es diferente de los maestros tradicionales porque ante todo tienen que ser grandes observadores de los intereses y necesidades individuales. Deben usar correctamente cada material y ayudar al niño a realizar las actividades.
Además, tienen la gran tarea de encaminar a los niños a desarrollar la autodisciplina, la bondad y la cortesía para que ellos puedan aprender a observar, cuidarse y amarse